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Odio supremacista en La Feliz

Mar del Plata panorámica: la playa veraniega atestada, la profundidad de la ciudad, lo urbano se extiende más allá del alcance del plano. Colores saturados y una guitarra metalera de fondo. Disonancia.


Por Santiago Zynda.

En La Feliz: Continuidades de la Violencia, segundo documental dirigido por Valentín Javier Diment, Mar del Plata escapa todos los idealismos posibles, mostrando un lado desconocido para el público no autóctono de la ciudad dueña del apodo más incontestablemente optimista. No es un lado pintoresco, sino siniestro. A unas cuadras del epicentro turístico se erigen pintadas nazis y fascistas, grafitis de aerosol fresco. Es reciente la revitalización de estos ideales que parecían ya sepultados en la tumba de la intolerancia obsoleta, pero su origen es antiguo, y La Feliz busca trazarlo.

Los primeros testimonios describen la ciudad como el hogar de un gran número de desempleados, criminales y gente de derecha, pero por sobre todo se enfatiza el trauma citadino: el resentimiento.

La génesis marplatense tuvo como modelo los glamorosos balnearios franceses del siglo XIX. En traje liviano los hombres y en vestido veraniego las mujeres, recorrían la orilla hablando de arte, literatura o negocios. La llegada de Perón al poder trajo consigo a las hordas populares con su adquirido derecho a vacacionar, gestando un rencor insalvable dentro de la elite desplazada y sus pares ideológicos.

A unas cuadras del epicentro turístico se erigen pintadas nazis y fascistas, grafitis de aerosol fresco.


Ese rencor se volvió tangible con la aparición de la CNU (Concentración Nacional Universitaria), agrupación considerada el brazo universitario de la Triple A. El documental relata vívidamente, utilizando dramatizaciones, recortes periodísticos, testimonios y fotografías, los crímenes perpetrados por la agrupación antes y durante la última dictadura militar.

Se hace foco en el asesinato de Silvia Filler en 1971, una joven estudiante de arquitectura; la matanza de 5 hombres en represalia por el homicidio de Ernesto Piantoni, líder de la CNU en 1975 (haciendo efectiva la famosa frase de Perón del 5 x 1 luego de los bombardeos a Plaza de Mayo); y la Noche de las Corbatas en 1977, orquestada por el ejército, en la que se secuestró a abogados laboralistas y a miembros de sus familias, resultando en ocho desapariciones/ejecuciones.

Los raccontos de la raíz de la violencia marplatense se alternan, y consecuentemente buscan conectarse, con los crímenes cometidos en los últimos años por una banda de jóvenes neonazis y fascistas que, disfrazados de nacionalistas heroicos, han golpeado brutalmente y amenazado de muerte a miembros de agrupaciones sociales de pensamiento y accionar opuesto al suyo (una de las víctimas es miembro de una organización llamada Acción Antifascista).

María Eugenia Vidal y Carlos Fernando Arroyo, intendente de Mar del Plata.

Son los responsables de las pintadas mencionadas previamente como también de otras con objetivos más específicos: de carácter xenófobo contra la comunidad boliviana, y de carácter vandálico y negacionista contra el monumento de la base naval en memoria de los crímenes contra los derechos humanos perpetrados en ese sitio durante la dictadura.

Sus miembros se muestran felizmente fotografiados haciendo gala de costumbres de manual: saludo al führer, prácticas de tiro a la intemperie con armas de fuego de alto calibre y para no dejar duda sobre sus inclinaciones: el águila negra del partido Nacional Socialista (Parteiadler) se ve tatuada sobre el pecho de uno de ellos en casi todas las imágenes.

La esencia del documental está en la inquebrantable conexión entre las guerras ideológicas, políticas y sociales del pasado y del presente y la búsqueda de los representantes de cada extremo del espectro de lograr establecer su verdad como la hegemónica. La Feliz intenta comprender los motivos de aquellos a quienes repudia, dando voz a los responsables de la violencia y procurando esclarecer su premisa: gana el que escribe la historia y si se aniquila o se amedrenta al enemigo, la disputa por fijar una verdad particular será simplificada. Afortunadamente para las víctimas recientes, a veces no hay indultos ni amnistías, solamente condenas efectivas.



Valentín Javier Diment
La Feliz: Continuidades de la Violencia
87 min
Sábados de abril en el Malba, Av. Pres. Figueroa Alcorta 3415

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