Literaturas

Jazmín Nogaró: “Leer es soltar la mente y viajar sin moverme del sillón de casa”

Jazmín tiene 24 años y es de Buenos Aires. Es la creadora del proyecto literario Viajar en palabras, una cuenta de Instagram con más de 23 mil seguidores donde inspira a los jóvenes hablándoles de su mayor pasión: los libros.


Por Gabriela Lucatelli.

La simpatía de Jazmín Nogaró trasciende la pantalla. Tiene una chispa imposible de no admirar y quedarse contemplando. Debe ser por eso que conquistó de manera tan espontánea una red social como Instagram, convirtiéndose en toda una influencer literaria. Su perfil @viajarenpalabras comenzó con el objetivo de compartir sus opiniones sobre algunos libros que le gustaban pero lo que no se esperaba es que con el tiempo las recomendaciones literarias se convirtieran en su trabajo. Actualmente es una de las boosktagrammers más conocidas de Argentina, coordina talleres, clubes de lectura y colabora con las editoriales más importantes. Te invito a conocerla un poco más en esta hermosa charla que tuvimos el placer de compartir y donde reflexionamos un poco acerca del maravilloso universo literario que la rodea, dentro y fuera de la pantalla.

¿Cómo surgió la idea de comenzar viajar en palabras?

Viajar en palabras surgió un poco de casualidad o como a mí me gusta decir, de causalidad. Siempre fui de leer mucho, tanto que en las juntadas con amigos o familia terminaba recomendándoles mis libros favoritos. Fue así que un día me preguntaron por qué no comenzaba a escribir reseñas, a dejar un registro de mis lecturas. Ahí es cuando con dos amigos decidimos abrir la cuenta de Instagram y nos encontramos con todo un mundo por descubrir: el de bookstagram. Lo que hacíamos era volcar nuestras lecturas, tanto las que nos gustaban como las que no y las acompañábamos con fotografías tomadas por nosotros. Con el tiempo ellos siguieron sus caminos creativos y continué yo sola con la cuenta.

Retrocediendo un poco en el tiempo, ¿te acordás de tu primer acercamiento a la literatura? ¿Cuál fue el primer libro que te atrapó?

Mi mamá todas las noches antes de ir a dormir me leía un cuento así que tomé el hábito de la lectura desde muy chica. A mis primeros libros, los de Fisher Price, los recuerdo perfecto porque los sigo teniendo en casa. Eran unos libros infantiles que venían con juegos didácticos. Otro recuerdo de la infancia eran las ferias que organizaba mi colegio y ya en esa época asistir era todo un acontecimiento para mí.

“Mi objetivo es fomentar el hábito lector a través de lecturas que incluso me inspiran a mí a seguir leyendo”.


Tu cuenta de Instagram fue creciendo en popularidad y con ello se te abrieron oportunidades laborales, ¿era algo planeado trabajar gracias a las redes?

¡Definitivamente no! Viajar en palabras empezó como un hobbie prácticamente al mismo tiempo que empecé la facultad. Era mi sueño lograr que alguien leyera gracias a mí pero jamás pensé que algún día podría llegar a monetizarlo y empezar a trabajar gracias a mi cuenta. Me recibí en Comunicación y fue una carrera que me abrió por completo la cabeza, porque hasta ese momento creía que si quería vivir de la escritura tendría que terminar trabajando para un diario, sin tener en cuenta todas las oportunidades que existían dentro del mundo digital. Puestos como community manager o creador de contenido no existían todavía, o quizás sí pero estaba más invisibilizado. Fue así que pude transformar mi hobbie en un trabajo y por supuesto que no fue de un día para el otro sino que lo fui descubriendo a medida que mi Instagram iba creciendo. Hoy leo mucho más por trabajo que por placer, ya sea porque lo que estoy leyendo es una colaboración con una editorial o es una lectura que vamos a trabajar en alguno de los clubes que organizo.

Una vez contaste que a tu familia y amistades les había sorprendido que te hicieras una cuenta de lecturas y no de fútbol, ¿cómo lográs equilibrar todos tus intereses?

Me hacés reír con esta pregunta porque sí, es así. Tengo intereses muy distintos y si me tengo que definir con una palabra digo que soy versátil. Así como soy una apasionada de los libros, me encanta el fútbol, la cocina, las manualidades, etc. Soy tan curiosa que todo lo que llama mi atención voy hasta la raíz y busco aprenderlo. La lectura está muy presente en mi día a día porque justamente es mi trabajo pero en los ratos libres usualmente busco hacer cosas que no estén relacionadas. Antes del covid iba con mi familia a la cancha todos los fines de semana. Me sucede que los intereses que tengo son mucho más que un simple interés. Sentarme a leer es mucho más que leer, es soltar la mente y viajar sin moverme del sillón de casa, y al mismo tiempo conectar con los autores u otros lectores. El fútbol es más que un partido, es un momento de unión entre mi familia. La cocina lo mismo, es la forma más linda de volcar amor y cuando cocino estoy concentrada cien por ciento en eso y no me enfoco en otras cosas. Exactamente como en el libro de Laura Esquivel, Como agua para chocolate. También me encanta estar con mi familia, con mis amigas… pero también por supuesto necesito mis momentos de soledad e introspección. Lo importante es lograr equilibrarlo, hay cosas de las cuales ya no dispongo de tanto tiempo.

¿Qué proyectos estás llevando adelante actualmente?

Hoy Viajar en palabras es más que un blog donde recomiendo libros. Está conformado por varias secciones. Tengo una que se llama Viajar con autores, donde entrevisto a escritores nacionales, otra que es ¿Cómo se escribe? donde a partir de divertidas trivias nos sacamos las dudas frecuentes que tenemos a la hora de escribir, Viajar como chicos donde recomiendo literatura del género infantil y Literarte que es un espacio donde fusionamos literatura y el arte. En estos encuentros mensuales yo leo mientras mi amiga Sofi pinta, siempre teniendo como eje central la obra de algún pintor en particular. Después está mi sección favorita de todas que es Un libro, un destino, donde recorro distintos destinos del país y del mundo a partir de las historias que nos cuentan los libros. Por cuestiones obvias actualmente esa sección está un poco frenada. En cada una de estas secciones mi objetivo es fomentar el hábito lector a través de lecturas que incluso me inspiran a mí a seguir leyendo. Por fuera de todo esto, coordino cuatro clubes de lectura. Es el lugar donde más estoy poniendo el foco en estos momentos. Todos son clubes para adultos excepto uno que es para adolescentes.

¿Cuántos lugares conociste ya con la sección “Un libro, un destino” y cuál es tu favorito hasta el momento?

Con esta sección pude anexar la literatura con otra de las cosas que más me gusta hacer que es viajar. Recorrí mucho la provincia de Buenos Aires y Córdoba que es mi lugar en el mundo. La Cumbre es un pueblo súper cultural y tiene una movida de escritores enorme. Pero el destino al que jamás creí que llegaría gracias a Viajar en palabras fue México. Yo ya conocía La Riviera Maya pero con esta sección la descubrí desde otro ángulo. Para el 2020 tenía planeado varios viajes que tuvieron que posponerse y estoy cruzando los dedos para que puedan finalmente efectuarse pronto.

Trabajar con las redes puede llegar a ser agotador por momentos, ¿qué cosas hacés cuando necesitás desenchufar un poco la mente?

Tal cual, trabajar con las redes puede ser agotador cuando te excede. Estoy prácticamente todo el tiempo con un dispositivo encima así que cuando necesito desenchufar la mente lo que hago es directamente apagar todo. Suelo poner mucha música para relajarme, ya sea alguna playlist o música instrumental de fondo mientras leo. Me gusta también escuchar algunos podcast, salir afuera, estar entre la naturaleza. Y por supuesto desenchufar es también pasar tiempo con las personas que más quiero. Hablo hasta por los codos -te habrás dado cuenta a esta altura de la entrevista jajaja- así que cuando me junto con gente me gusta dejar los celulares de lado y disfrutar el momento presente. Actualmente los fines de semana me los tomo para descansar, me obligo a desconectarme para arrancar la semana descansada. Aun así, por más que trabaje con libros sigo encontrando en ellos cierta sensación de escape. Me conectan con lo más lindo de mí y no son para nada una carga.

¿Cómo podemos hacer para sumarnos a tus clubes de lectura?

Para sumarse a los clubes me pueden escribir por mensaje directo en Instagram. Hay temáticas para todos los gustos. Uno es de ficción para adultos, otro de libros enfocados en el desarrollo personal y profesional, otro de literatura infantil y el último para adolescentes. Paralelamente estoy coordinando un taller que se llama #BasadaClub en el que trabajamos con libros que tengan sus adaptaciones cinematográficas. Este club tiene su propia página web donde se pueden adquirir hermosos productos literarios: Basada en el Libro.

¿Dónde te ves de acá a unos años? ¿Cuál es ese sueño por concretar?

Dentro de lo que es Viajar en palabras me gustaría seguir trabajando para alimentar el hábito lector. La lectura es una herramienta que hace muy bien y que invita a desconectarnos en este mundo tan hiperconectado. De algún modo los libros son la excusa para ir al encuentro con una misma. Mi sueño es seguir fomentando el amor por los libros en otros y también en mí. Después en lo que respecta a mi vida profesional me cuesta responder porque tengo intereses y metas académicas muy diversas. Soy profesora, investigadora y por otra parte tengo mis propios clientes dentro de lo que son las estrategias de comunicación y marketing digital. Sin dudas me veo buscando el equilibrio entre todos mis intereses. A largo plazo me encantaría tener mi propia familia, algo que considero súper central en mi vida, y seguir recorriendo el mundo. Siento que tengo mucho aún por conocer y tengo la fortuna de que mi trabajo sea cien por ciento remoto, lo que me permite poder hacerlo sin problema desde cualquier lugar donde me encuentre. Los sueños a veces van cambiando dependiendo de las circunstancias de la vida, pero lo que espero que se mantenga es el contacto con la gente y seguir encontrando esa chispa más humana que hoy, por fortuna, la encuentro en los libros.


Related posts
Literaturas

Las causas perdidas | Relatos que extraen belleza de la melancolía

Poéticas

La culpa ya no es de tus padres: Poesía urgente y melancólica

Poéticas

Liliana Lukin: “Yo soy mi cuerpo, y eso es lo que escribo”

Poéticas

Fede Llera: "La victoria puede ser un lugar incómodo, demasiado exigente y trabajoso de mantener"

Seguinos en las redes @rudalarevista Revista ruda
Worth reading...
Lucía Gris: “La pandemia hizo que crezcan otros modos de llegar a las personas”